sábado, 25 de mayo de 2013

EL SALTO DEL HUERGO (EL ROLLO 2013)

El 17 de mayo decidimos ir a Bordón para celebrar una de las festividades más tradicionales del pueblo, la Fiesta de "El Rollo". El único inconveniente es que se celebra en lunes y los "forasteros" debemos cogernos un día de vacaciones para poder acudir. Pero bueno, si nos venimos el viernes por la tarde tenemos por delante todo un fantástico fin de semana largo para disfrutar.


Aprovechamos los días para hacer todo aquéllo que nuestra vida cotidiana no nos permite: reencontrarnos con los familiares, charrar con las "viejas" amistades, visitar otros pueblos, hacer caminatas por los alrededores, deleitarnos con el magnífico cielo estrellado (si no está "nublo"), respirar aire puro... en fin, lo que llamamos vida sana.


El Salto del Huergo
Sergio, Eva, Toni, Laura, Mª José y yo decidimos dar un pequeño paseo desde Las Planas de Castellote hasta el Salto del Huergo, un lugar precioso donde el río de Bordón forma una fotogénica cascada, muy bonita. Esta serie de fotos son parte del paisaje que nos encontramos recorriendo la pista que parte desde el pueblo y que coincide con el GR.8.




Es una pena que todas las construcciones que nos encontramos por el camino estén en un estado de ruina total. Cada una de ellas tiene su encanto particular... pero es que ni siquiera están habitables. Hay un conjunto de casas formando el Mas de El Huergo, con molino incluido, situado en un entorno de cine. Muy cerca del río, a unos pocos metros del mismísimo Salto del Huergo, en un paraje bellísimo, a pie de sendero.







Los más intrépidos que se atrevan a descender por el río desde el pueblo de Bordón, acabarán en este maravilloso paraje tras atravesar el magnífico desfiladero que se aprecia al fondo desde el pequeño puente de piedra. Éste forma una atalaya excepcional para obtener las mejores vistas del Salto del Huergo, con su pequeña cascada de agua que por estas fechas caía en abundancia.






En la parte de arriba, en la pequeña presa a modo de bañera, puedes darte un buen chapuzón siempre que las algas te lo permitan. Pasada la cascada, más de 25 metros de piscina natural para nadar a tus anchas que finalizan en un río ya sin cubrir, ideal para que se bañen los mayores o jueguen los pequeños. Y en pleno verano un puñado de chopos nos harán disfrutar de su agradable sombra. Si compartimos esta experiencia con familiares y amigos, ¿qué más podemos pedir?



A la vuelta nos encontramos con Félix y Cristina... ella me cogió la cámara prestada y se hicieron también algunas fotos más, con el Salto del Huergo como telón de fondo. ¡¡¡Míralos ellos que guapetones!!!...




¡¡¡Hasta la próxima!!!